jueves, 6 de noviembre de 2014

HOY SE ME ENCOGIÓ EL CORAZÓN

     
     Hoy vi llorar a mi amiga de la Maestría. Se me encogió el corazón. No es la primera persona que me dice que le fue mal en el trabajo grupal. ¡¡¡El famoso trabajo grupal!!! ¿No debería considerarse orientarlo, arbitrarlo, dinamizarlo? ¿No se lograrían el desarrollo de las competencias si se hace esto? Y lo que sería hermoso: lograr desarrollar la amistad, la solidaridad, el amor, el cariño, el respeto entre nosotros, compañeros de aventura momentánea?

Mi filosofía de la vida es gustar de cada día. Es gozar el proceso. ¿Las notas? pues deberé cuidar no desaprobar pero ser feliz en una conversación en el aula o en los pasillos o en Tinkuy, cómo ahora que Karina nos está enseñando cómputo...porque regresaré a Ilo y, es posible que ya no nos volvamos a ver... me quedarán los recuerdos...

Por eso he decidido vivir. He decidido aprender no sólo lo que me imparten en la Maestría sino aprender a ser solidaria, respetuosa, amiga...en cinco minutos apagarán la luz...me tengo que ir...pero me voy sintiendo que tengo que hacer algo aquí en la PUCP, en mi aula con mis compañeros, Dios me lo pide...gracias Dios por darme otra oportunidad de vivir y de vivir dignamente, buscando el bien común que tanto pregonaba pero que, sólo ahora, me doy cuenta que no lo sentía verdaderamente y no lo practicaba... gracias...

Olga Mamani